lunes, 3 de julio de 2017

El hombre propone ....

Todo el mundo habrá oído alguna vez el dicho "El hombre propone y Dios dispone" . Viene a decir que que no siempre pasa lo que uno quiere que pase. Lo ideal sería lo contrario. Yo propongo y Dios, haga lo que haga, tenga a bien disponer de parte de mis proposiciones. Siempre algo es propuesto pero, a menos que "propositor" sea el mismo que el "dispositor", no siempre será dispuesto. Es decir, es lo mismo que he dicho arriba. Y es así (no lo de repetir, claro) desde que el mundo es mundo. Siempre hay algo que puede impedir. Y es así, otra vez, porque si todos dispusiéramos de lo que proponemos, no habría mucha gente en el mundo porque seguro que más de uno se propondría tener todo mientras que el propósito de otro es que no se lo quiten.
¿A qué viene todo ésto? Muy sencillo. Viene a consecuencia de la política española. Bueno, la política en sí, no. Más bien la política del Gobierno. En una situación como en la que estamos (para mí es la ideal donde la única forma de sacar las cosas adelante es negociando), el hombre, o sea, el Gobierno, propone algo y Dios, o sea, el Congreso, dispone. O sea (otro o sea más), dispone porque es así. Las proposiciones del hombre que se sienta en el extremo de la fila azul siempre han de ir aprobadas (o sea, dispuestas) por la gente de los sillones rojos. Hasta ahí, todo bien. Normalmente, una proposición es de alguien hacia otra persona. Y lo es porque si todo el mundo está de acuerdo en algo, eso se dispone de entrada. Entonces el hombre propone a Dios lo que quiere hacer. Pero no en plan de "disponme ésto que propongo", no. Una proposición, como el matrimonio por ejemplo, debe ser estudiada durante un tiempo para evaluar pros y contras. Mucho tiempo o poco. Pero tiempo. Y luego viene la respuesta. La disposición. En otros tiempos daba igual pero ahora, no. Claro que una cosa es no querer por no ser bueno y otra, muy diferente, es no querer por no querer. No es no y de ahí no me muevo. Y no se crea el lector (al que propongo lea pero la disposición de hacerlo es suya), que eso es algo que ha inventado Figurín, alias Pedro Sánchez. El famoso "váyase, señor González" que decía Aznar era otra forma de no es no. Pero no se podía disponer algo diferente a lo propuesto porque los "propoyentes" sumaban más que el total de los "proponidos". El no sólo porque algo no me gusta es un no sin fundamento. A mí, por ejemplo, no me vale un "porque si" o un "porque no". Me gusta el saber porque son las cosas. No es no. ¿Porqué? Porque propone Fulano. ¿Y lo de Fulano es malo? Si ¿Porqué? Porque es de Fulano. ¿Sólo eso? Si. Lo que uno propone, debe ser porque tiene una intención positiva para la gente hacia quien va dirigida dicha propuesta. Y Dios, lo qué debería hacer es estudiar la propuesta y estudiar si vale o no. Más que nada porque a Dios le elegimos, algunos, para que cuiden de nosotros y velen por nuestros intereses. Intereses que también son los suyos ya que si lo hacen bien, volveremos s confiar en el mismo Dios. Espero que la gente se haya dado cuenta que ese Dios al que me refiero, no es una persona sola si no una especie de ente. Es una nueva forma de decir lo mismo que más arriba. Eso sí, es muy complicado que Dios se ponga de acuerdo, como también repito. Proponer para disponer no es lo mismo que proponer para disponer. No se preocupe nadie que me propongo explicarlo. No es lo mismo proponer algo para quien dispone lo crea conveniente que proponer para que el "disponedor" disponga porque sí. Aunque ésto ya se ha hecho más veces. Y es malo. Mucho. Hacer lo que el hombre dispone porque él controla a Dios es una especie de dictadura. Y no llega a serlo porque, en alguna ocasión, Dios, por completo, dispone lo propuesto.
Y como ya me he enrollado bastante, me dispongo a terminar lo que me propuse empezar para que mis lectores se dispongan a leer si se lo quieren proponer.