domingo, 5 de noviembre de 2017

Martirio culpable. Culpabilidad mártir.

Realmente, aunque luego lo cambie, no sé que poner de título del artículo. Recuerdo en una entrevista a Serrat el siglo pasado, decía que las canciones las hacía al revés. Lo malo es que no me acuerdo qué iba primero. Letra o música. Pero bueno, supongo que cada maestrillo ..... A lo que voy, que, por supuesto, y como pasa en muchos de mis artículos, no tiene nada que ver con el sentido de los mismos (todos lo tienen, no se vayan a creer), es que suelo tener el título con la idea del artículo.
Al lío. Siempre he pensado qué quien huye de un posible requerimiento judicial porque oculta algo y no quiere que se sepa, es culpable. Siempre he pensado que quien se "esconde" en un país donde es más fácil el dificultar una extradición, es culpable. Siempre he pensado que quien se dedica a contar a quien le quiere (o le tiene) que escuchar, mentiras o realidades distorsionadas, es culpable. Y, por supuesto, siempre he pensado que, quien se entrega a la policía, es porque es culpable. Aunque se quiera ver (y que le vean) como mártir. Se me acaba de ocurrir el título. Mártir, sí. Todo lo que quiera. Mártir pero culpable. Eso sí, los demás también sufrimos un martirio con todo ésto. También somos mártires. Pero es culpable. Aunque lo único que le preocupa es que se hable de él y que le conozca la gente y que les caiga simpático y que se solidaricen con él. Ya está. Su pueblo, ése que votó a su amasijo de partidos (porque hay que recordar que él no ocupó el puesto de Artur Más como cabeza de lista) pero no a él, le importa ná y menos. Bueno, decir que su pueblo le votó es decir mucho. Fue el que más votos consiguió.
Y la demostración de la que digo, mi opinión y no la única verdad, verdad absoluta como ondean algun@s al expresar sus ideas, es que, cómo he dicho, digo y diré siempre (siempre que luego siga viendo que mi opinión no está equivocada, todo lo que ha hecho este señor está meditado. Muy meditado. Porque uno no contrata de la noche a la mañana a un abogado famoso por defender a etarras y que cobra entre 500-1000€ la hora. Uno no decide de la noche a la mañana decidir ir a un país donde, mira tú por donde, hay una justicia más independiente que aquí (algo que me gustaría a mí) y donde los delitos de los que se acusa, no se tipifican o catalogan como aquí. Además, es un país donde hay cierto conflicto independentista. Que casualidad. Uno debe ser responsable de sus actos. Al menos de cara al público. No al público al que ha tomado el pelo. No a los que han aprovechado el ponerse a su lado. Ha tomado el pelo a los que han creído en él.
Eligió el camino equivocado. Aunque no para él.

lunes, 16 de octubre de 2017

El si. El no. El no se.

Bueno, pues hoy era el día. Y digo era porque, según se requería, hace 17 minutos que acababa el plazo (me sorprende no haber oído la palabra ultimátum de una forma más vehemente), para que el sr. Puigdemont dijera lo que dijo, lo que no dijo, o lo que quería o no quería decir. Yo he dicho que uno no deja en suspenso nada. Igual que tampoco lo suspende. Eso sí, ambas cosas no son iguales. Dejar en suspenso es tener la intención de retomar lo que se deja en suspenso. Supender algo es terminar con el proceso de algo. Puede que se retome. Puede que no. Puede que lo que se haya dejado en suspenso se termine suspendiendo. Pero, se haga lo que haga, para hacerlo hace falta un algo. No se puede decir en suspenso una declaración de independencia si lo que se declara es una invitación a comer arroz con bogavante (idea que me dió una compañera de instituto), no. Si se invita a arroz, se deja en suspenso la invitación a arroz. Si se deja en suspenso la declaración de independencia, es porque se declaró. Y punto. Realmente no se a que juegan Soso y Pelofregona. Ellos y sus chicos. Como ya comenté en otro artículo, parece que juegan a ver quien la tiene más grande. O a ver a quien le dura más dura. Perdón por la grosería. Pero parece que, mientras a uno se le va la fuerza poco a poco, el otro estaba haciendo trampa. Vacilaba esperando que el de enfrente se retirara. Pero, como es como es, no sabía si irse, si no, si lo hacía, hacerlo rápido, despacio, .... O sea, al final, uno ha reculado. El otro, también. Pero ahora la cosa va en quién ha reculado más o lo ha hecho más rápido. O ambas cosas. Soso se ha equivocado por la idea de dejar pasarlo todo a la espera de acontecimientos. Más que nada porque tiene miedo de coger riesgos. Más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer. Claro que una de las cosas de este país que es bastante peculiar, es que uno critica a otro que no haga nada (como yo estoy haciendo ahora) pero, cuando lo hace, le critica por si no sale como se quería. A eso tiene miedo mucha gente. Yo mismo, por ejemplo. Y Pelofregona estaba en mitad de un órdago porque no lo había echado él pero sí tenía que jugarlo. Y no sé si es que pensaba que el rival tenía mejores cartas o las suyas no le parecían buenas, pero el caso es que reculó. Algunos dirán que mucho. Otros, no tanto. Algunos, demasiado. Pero Soso lo mismo. Esta actitud de ambos era algo que pensaba hace tiempo que podía pasar. Entre otras muchas, claro. Cada cierto tiempo, por ejemplo, me surgen ideas nuevas. La última es que, ya que el Impuesto estaba deseando gritar a los cuatro vientos que todo lo que hacía era porque le obligaban, ahora puede hacer que la CUP le mande al carajo, pierda la mayoría y se vea obligado a convocar elecciones. Obligado. Empujado. Él no quería, oiga. Pero esa idea nueva tiene sus dudas. Como todas, por supuesto. Si es así, ¿ha pensado en como serán los resultados?¿Seguirá pactando con una ERC que lleva tiempo queriendo desligarse de España, que supuestamente esa era la razón para formar Junts per sí, al que le queda menos vida que a una mosca, y que resulta que ahora da un respiro al jefe? Realmente no diría quien ha ganado esta guerra. Entre otras cosas porque ninguno, a mi parecer, lo ha hecho. Tampoco voy a entrar en decidir quien ha perdido menos. Pero si tengo claro que, perder, perder, lo que se dice perder, lo ha hecho Cataluña. La única que hay. Aunque lo complicado es volver a unir eso que separó unos tuppers. Aunque sea complicado volver a la normalidad. Aunque sea complicado mirar a la cara al vecino sin esa mezcla de odio e incomprensión y darle los buenos días. Aunque sea complicado volver a hablar de fútbol en el bar o tomarte una caña con los amigos. Aunque sea complicado ..... Muchas cosas serán complicadas. Más o menos. Eso dependerá de nosotros. Pero sí que hay una cosa que no será nada de complicada. Culpar. Bueno, no mucho porque habrá gente que me culpará a mí, por ejemplo, por estar a favor de la unidad. No todo podría ser de color de rosa.

martes, 10 de octubre de 2017

Ambigüedad estúpida. Estupidez antigua.

Siempre se ha dicho que los gallegos son de esa gente que, cuando dicen algo, no se sabe si van o vienen. De esa manera no sabes como hablar con ellos. Pero nunca he oído que se les calificara de ambiguos. En cambio, la pantomina de ayer en el Parlament de Cataluña, sí lo fue. Al menos, lo que se refiere al discurso del Honorable Carlos Puigdemont I, el Pelofregona. Ese sí pero no. Ese no pero sí. Se puede decir que contentó a medias a algunos. Cabreó a lo bestia a otros y confundió a los últimos. El caso es que, salvo los suyos, nadie quedó contento. Seguramente alguien esperaba blanco y se llevó gris o negro. Y alguien estaba preparado para criticar el negro y se encontró con un gris que tampoco les gustaba. Me recordó al papel que representaba Ed Harris en La Roca. Una especie de órdago que al final deja. La diferencia es que el Junqueras o la Gabriel de turno le matan. Aunque no diría yo que lo que ha hecho no sea, en cierto modo, su muerte política. Me da que es ese tipo de tío que se ha visto empujado a ponerse en primera fila (no sé qué rango político tenía, aparte de alcalde) cuando se nota que no sabe. Es como Zapatero que se sigue preguntando como pudo ser presidente del Gobierno durante siete años y medio. No se lo cree. Y actúa como le dicen. Lo malo es que no puede plantarse. Siempre he dicho que CDC nunca ha querido la independencia. Pero el sillón es adictivo. Pero la gente que vota va retirando apoyos. Pero los que llegan convencen más. Pero los que llegan intentan convencer que los demás no son buenos. Pero, al igual que pasa en el PP o el PSOE, todos los que se han visto salpicados por la corrupción, no estaban aforados. Algo, por cierto, de lo que todo el mundo se queja pero nadie quita. Así que tengo que hacer lo que sea para seguir en el aforo. ¿Qué dicen los demás? Ésto, lo otro y lo de más allá. Bien. ¿Qué me vendrá mejor?¿Ésto, lo otro o lo de más allá? Todo es elegir y negociar. Y eligió lo menos malo para ello. PP, PSOE y Cuidadanos les tenían en el punto de mira por los asuntos Pujol. Así que la decisión estaba clara. Y había que hablar de independencia. Me guste o no pero hay que sumar votos. Con ello empezó todo. ¿Apoyos? Sí. ¿Independentismo? Psé. A fin de cuentas, todo es dinero. Si me callo tengo pasta. Si protesto, tengo pasta. Hasta que alguien dijo que ya era demasiada pasta mientras le daba más pasta. Eso es lo que cuenta. Peri Pelofregona se ha visto empujado a envidar, luego a echar órdago para luego quitarlo. ¿Y porqué? Porque sabe que no. Nadie ha hablado de ello pero las cosas hay que pagarlas. Y aunque los que le dan pasta ahora, seguro que les van a seguir dando, tendrán que empezar a autofinanciarse. ¿Y cómo?¿Y de quién?¿Y porqué? Grandes preguntas que nadie ha hecho. Se ha hablado más del día de los tuppers. Se ha hablado más del chaval al que han golpeado en el mismo sitio en dos concentraciones diferentes.

martes, 3 de octubre de 2017

Fondo sin forma. Forma desfondada.

Todo el mundo sabe que todas las cosas tienen su forma y tienen su fondo. Aunque a veces se entiende mejor si es vez de forma se usa Alcampo (perdón, continente) y contenido en vez de fondo. Pero pensándolo mejor (porque existo igual que existe algo para propiciar una carga), igual lo junto todo.
Lo ideal es que todos den forma a un continente. Esa forma debe ser maleable ya que irá en función de lo que vaya a contener. Y cuánto va a contener. Eso sería lo bueno. Y en muchas ocasiones las cosas han empezado así. De hecho, pienso que todo ha empezado así. De hecho, si son varios los que meten, lo normal es que miren si hay sitio o hay que modificar la forma del continente. De hecho, lo normal es que, en función de lo que vean, pregunten si se puede meter y si puede afectar a la forma del continente. De hecho, si alguien pensó que llegaría un momento en que ya no habría que aumentar el contenido y/o el fondo y que el contienente debería de ser maleable,  consersuarse. De hecho, si es necesario, hay que buscar una solución. De hecho, si unos están empeñados en meter y no les dejan dónde, pueden decidir por su cuenta un continente para adaptarlo a la forma que les interesa. De hecho, eso puede producir un problema si a los otros no les gusta. De hecho, eso puede producir un problema si los unos meten en dos sitios. De hecho, puede producir un problema si parte de los otros están a favor de que los unos puedan tocar los dos continentes, si otra parte está pensando en que lo normal es ver como se pueden juntar las dos formas modificando la que hay, si otra parte quiere que los unos saquen todo lo suyo de su continente, .... De hecho, será un problema si sigo dividiendo a los otros. De hecho, ya sería bueno que dejara los "De hecho" de lado. De hecho voy a hacerlo en cuanto diga que, de hecho, tanto problema genera un problema que puede llegar a la rotura de uno, otros o ambos continentes lo que, de hecho, haría perder todo el contenido. De hecho, eso sería lo último que quisiéramos. De hecho, yo. De hecho, hay gente que lo busca. Y ya se sabe que quien la busca, la sigue. Y quien la sigue, la consigue. Pero de hecho, ya están avisados.
De hecho, terminé.

martes, 26 de septiembre de 2017

El catalán.

El verano hace que uno, no es que pierda costumbres, que no, sino que las deje aparcadas. Eso ha pasado con mis blogs. Eso sí, que nadie se crea que lo he olvidado. He estado escribiendo preparando los nuevos artículos. Y aquí va uno de ellos de la más actual actualidad.
Por desgracia​, tras los atentados en Barcelona y Cambrils, ha saltado a la palestra el tema del catalán. Bueno, del uso de la lengua catalana mejor dicho. La gente se ha puesto de uñas (y seguirá, seguro) por todo lo que se ha generado por este tema en vez de analizar lo que falló y porqué falló. Si falló algo, claro. Porque hay gente que dice que sí y otra, que no. Pero eso no es lo importante. Al menos, parecía que no. Lo importante era que se usara el catalán como lengua. Para mí, que quede bien claro, el catalán es como el galego, el bable, el euskera y todas esas lenguas que hay en este país. Lenguas porque la Constitución dice que el único idioma es el castellano. Lenguas que sirven para enriquecer, aún más si cabe, la amplia oferta cultural de este gran país que es España. Pero ese no es el tema.
La cosa saltó por el enfado de un periodista holandés porque la rueda de prensa que estaban dando el mayor de los Mossos y el consejero de interior de la Generalitat se estaba dando en catalán. El periodista fue enviado aquí porque domina el castellano. Pero no el catalán. Si fuera una rueda de prensa en la que sólo fueran periodistas catalanes, o que entiendan catalán, me parece bien que se use. Pero donde hay gente de otras partes, pienso que no costaba nada hacerlo en castellano. El periodista lo tomó como una falta de respeto y se fue. Seguro que no fue el único. He estado en Barcelona y, si la persona que iba conmigo hablaba en castellano, la respondían en castellano. La conocieran o no. Ella es catalana. Yo pensaba que sería por mí. Pero no. Igual me pasó de pequeño estando de vacaciones por las tres provincias valencianas. Si no te conocen, esperan a que respondas. También recuerdo un viaje a Andorra. A la vuelta hicimos una parada en un pueblo. Hubo gente que entró en un bar pero poco después salieron enfadados. Los carteles estaban en catalán. Así que nos metimos en el de enfrente. Podría ser más catalán e independentista que el otro pero tener los carteles en castellano no le ocasionaba esos problemas.
Pero a lo que vamos. Todo este tema ha venido en medio de todo el jaleo del referéndum y la independencia. Y resulta que hay gente que quiere distorsionar los hechos. Desde dentro de Cataluña se quiere vender que desde fuera no gusta que se hable en catalán y, desde fuera, desde fuera, se quiere vender que la gente es intransigente. ¿Y quién monta estas historias?¿O quienes? Pues sinceramente, da igual. Es más, puede que sean los mismos. Porque puede que haya gente que lo piense. Pero hay otros que no. Si no me importa que la gente hable en galego o valenciá (digo yo que será así y sino, que me perdonen), no se porqué me va a importar lo otro. O sea, que no. Eso sí, soy intransigente en lo de la independencia. Pero eso es otro tema. Como dije más arriba, el catalán, la lengua catalana, forma parte de esa gran variedad cultural de España. Lo malo es que alguien lo quiere usar en beneficio propio. Espero que le salga mal. Y también espero que la gente respete de la misma manera que exigen respeto.
Adeu.

lunes, 3 de julio de 2017

El hombre propone ....

Todo el mundo habrá oído alguna vez el dicho "El hombre propone y Dios dispone" . Viene a decir que que no siempre pasa lo que uno quiere que pase. Lo ideal sería lo contrario. Yo propongo y Dios, haga lo que haga, tenga a bien disponer de parte de mis proposiciones. Siempre algo es propuesto pero, a menos que "propositor" sea el mismo que el "dispositor", no siempre será dispuesto. Es decir, es lo mismo que he dicho arriba. Y es así (no lo de repetir, claro) desde que el mundo es mundo. Siempre hay algo que puede impedir. Y es así, otra vez, porque si todos dispusiéramos de lo que proponemos, no habría mucha gente en el mundo porque seguro que más de uno se propondría tener todo mientras que el propósito de otro es que no se lo quiten.
¿A qué viene todo ésto? Muy sencillo. Viene a consecuencia de la política española. Bueno, la política en sí, no. Más bien la política del Gobierno. En una situación como en la que estamos (para mí es la ideal donde la única forma de sacar las cosas adelante es negociando), el hombre, o sea, el Gobierno, propone algo y Dios, o sea, el Congreso, dispone. O sea (otro o sea más), dispone porque es así. Las proposiciones del hombre que se sienta en el extremo de la fila azul siempre han de ir aprobadas (o sea, dispuestas) por la gente de los sillones rojos. Hasta ahí, todo bien. Normalmente, una proposición es de alguien hacia otra persona. Y lo es porque si todo el mundo está de acuerdo en algo, eso se dispone de entrada. Entonces el hombre propone a Dios lo que quiere hacer. Pero no en plan de "disponme ésto que propongo", no. Una proposición, como el matrimonio por ejemplo, debe ser estudiada durante un tiempo para evaluar pros y contras. Mucho tiempo o poco. Pero tiempo. Y luego viene la respuesta. La disposición. En otros tiempos daba igual pero ahora, no. Claro que una cosa es no querer por no ser bueno y otra, muy diferente, es no querer por no querer. No es no y de ahí no me muevo. Y no se crea el lector (al que propongo lea pero la disposición de hacerlo es suya), que eso es algo que ha inventado Figurín, alias Pedro Sánchez. El famoso "váyase, señor González" que decía Aznar era otra forma de no es no. Pero no se podía disponer algo diferente a lo propuesto porque los "propoyentes" sumaban más que el total de los "proponidos". El no sólo porque algo no me gusta es un no sin fundamento. A mí, por ejemplo, no me vale un "porque si" o un "porque no". Me gusta el saber porque son las cosas. No es no. ¿Porqué? Porque propone Fulano. ¿Y lo de Fulano es malo? Si ¿Porqué? Porque es de Fulano. ¿Sólo eso? Si. Lo que uno propone, debe ser porque tiene una intención positiva para la gente hacia quien va dirigida dicha propuesta. Y Dios, lo qué debería hacer es estudiar la propuesta y estudiar si vale o no. Más que nada porque a Dios le elegimos, algunos, para que cuiden de nosotros y velen por nuestros intereses. Intereses que también son los suyos ya que si lo hacen bien, volveremos s confiar en el mismo Dios. Espero que la gente se haya dado cuenta que ese Dios al que me refiero, no es una persona sola si no una especie de ente. Es una nueva forma de decir lo mismo que más arriba. Eso sí, es muy complicado que Dios se ponga de acuerdo, como también repito. Proponer para disponer no es lo mismo que proponer para disponer. No se preocupe nadie que me propongo explicarlo. No es lo mismo proponer algo para quien dispone lo crea conveniente que proponer para que el "disponedor" disponga porque sí. Aunque ésto ya se ha hecho más veces. Y es malo. Mucho. Hacer lo que el hombre dispone porque él controla a Dios es una especie de dictadura. Y no llega a serlo porque, en alguna ocasión, Dios, por completo, dispone lo propuesto.
Y como ya me he enrollado bastante, me dispongo a terminar lo que me propuse empezar para que mis lectores se dispongan a leer si se lo quieren proponer.

miércoles, 14 de junio de 2017

Moción censurable. Censura "mocionable"

Tirando de lo lógico, una moción de censura debe ser algo que se hace para, como su nombre indica, censurar el comportamiento de alguien con la idea de que cambie. Pero en política es algo para cambiar a alguien en vez de algo. Así, al que le da por pensar (*) como a mí piensa (**) que si alguien quien hacer una, lo lógico es que sea, sino para ganar, si para decir algo. No recuerdo ninguna de las otras dos pero tuvieron el mismo resultado que ésta. Muerte antes de nacer. Lo dicho, decir algo. Proponer algo. Anunciar algo. Pero por lo que he visto en los informativos, he leído y me han contado, ha sido, como lo han calificado muchos, una enorme pérdida de tiempo. Igual es una cosa que se han montado para justificar su sueldo. Ese tan alto que, al serlo, la gente se pregunta que conceptos incluye. Pero eso, ya hablaré en otro momento. Porque eso. Es como querer remontar una eliminatoria donde un equipo trae 10 goles de desventaja. Hay que estar, sí. Te pagan por ello. Pero sólo se está. Que el PP está salpicado de casos de corrupción lo saben hasta los chinos. Y no los de la costa sino los del interior que no tienen tele. Se dice que es el partido que más investigados (también he dicho que el término es incorrecto porque al investigar a buscan pruebas para incriminar a alguien e imputarle) pero que quien más dinero se ha llevado es el PSOE. El hecho de que el PP no haya sacado mayoría absoluta hace pensar a más de uno que su tiempo, al igual que el de los elfos en El Señor de los Anillos, ha terminado y que tienen que emigrar. También me hace gracia la afirmación de que la mayoría e los españoles quiere gobierno de izquierdas por el número e votos. Si alguien repasa los resultados de todas las elecciones, creo que ningún partido sacó nunca más del 50% de los votos. Otra razón estúpida para presentar una moción. Otra razón con la que Podemos (hoy no le llamaré Engañemos como siempre) se equivoca. Pero les da igual porque sabe que mucha gente, la gente del titular, se va a quedar con esa frase aunque también sin respuesta cuando alguien le pregunta acerca de esas supuestas mayorías electorales. De equivoca el conglomerado en cierto modo pero, por otro lado, puede que si haya conseguido lo suyo. Conseguido lo que quería Pablo Iglesias. Conseguido lo que querían los que iban a apoyarles. Porque si llamó a Ana Oramas tránsfuga (tengo que saber porqué) algunos de los que les apoyaban también habían apoyado los presupuestos. Bien les hubiera venido que si, Dios no lo quisiera y por suerte no lo quiso, esos acuerdos les costaran más al nuevo gobierno o los otros perdieran las contraprestaciones que sacaron en las negociaciones presupuestarias. Eso sería lo segundo. Pero lo primero era conseguir lo que más le gusta. Centrar la atención mediática. Toda ya que Pedro Sánchez no estaba. Le ha dado igual que, como hizo Albert Rivera, el mejor orador según dicen, le llamen incompetente. Que lo es salvo que se crea que está en el Circo Price, el Circo del Sol o algo parecido. Es algo que he dicho, digo y diré. Esta gente que es lo ideal es tomárselo como un juego. No tomarlo tan en serio. Pero en eso se equivocan también. Las cosas serias hay que tomarlas en serio. Por eso se llaman serias. Y un payaso no vale para ello. E vuelven a equivocar.
* Hay gente que pide perdón por ello
** Ya se que repetir una palabra aunque sea en diferentes formas no es técnicamente correcto pero es, simplemente, una forma más de expresarse.

miércoles, 24 de mayo de 2017

Respecto al respeto.

Pues que queréis que os diga. Lo bueno de un país libre es que uno tiene derecho a escribir, leer, decir o pensar lo que quiera. Incluso actuar. Aunque hay algo que comparten los países libres y los que no. Las leyes que limitan lo que se puede escribir, leer, decir o actuar. Lo de pensar no porque lo que uno piensa está en la mente. Si lo saca, lo escribe, lo dice o lo hace. En una democracia se tiene esa libertad para pensar diferente. En una dictadura hay una firma oficial de pensar y punto.
Pero a lo que voy. Últimamente, y no tan últimamente, me he dado cuenta que hay gente que escribe y dice lo que piensa (lo normal) pero, lo que escribe y dice es que lo de los demás no es. ¿No es? Sí, no es. ¿Y qué es eso de que no es? Muy sencillo. Tengo la costumbre de leer y oir lo que escriben y dicen los demás. Lo hago porque quiero. Lo hago porque algunas de esas cosas que leo me dan ideas para artículos en mis cuatro blogs. Lo hago porque me gusta leer lo que escriben y comparten la gente que tengo en mis contactos de Facebook. Eso sí, una cosa es la idea y otra, muy diferente lo que escriba. Eso es mi opinión. Y mis opiniones no son verdades absolutas. Pero hay gente que cree que las suyas si por lo que no entiende que haya personas que no las corroboren. Ejemplos varios. Religión. Soy ateo desde los 13 años pero eso no quita que pueda defender alguna postura del clero o, simplemente, sin defender nada, criticar la forma en la que de abalanzan sobre ellos. Para ellos todos son iguales, están anticuados y son homófobos, machistas y xenófobos. Y yo también porque rebato esas ideas. No hablan de la gente a la que ayudan, cuidan y favorecen. Parece ser que no puedo pensar que se pasan o que están equivocados.
Corrupción. Dado que suelen ser de izquierdas, para ellos la corrupción significa PP. El PSOE, IU, CDC, .... Incluso los suyos morados tienes juicios por ahí. Es más, se dice que el PP tiene más imputados (lo de investigado, para mí es alguien que aún no está acusado) pero el PSOE, más defraudado. Pues comenta ese hecho. Que falta gente. O igual se ha metido que, aunque sea de momento, no debería estar. Ahí, por lo menos, hay veces que cambian el saltar acusando de defender a los ladrones (eso quiere decir que no leen) por el decir que es cierto que hay más gente. Eso sí, nunca de primeras.
Política. Críticas a lo que hace el PP. Hay cosas en las que tienen razón, cosas en las que falta información y cosas en las que mienten. Comentar eso en vez de aplaudir me convierte en facha. No entienden la postura centrista.
Fútbol. Hablar del Real Madrid sin hablar de su grandeza significa que lo hago por ser antimadridista. Ni aficionado al fútbol ni nada. Es más, aquí tienen como máxima que el que calla otorga y, si no, se pica.
Y así alguna cosa más. Yo expreso mi opinión. Como mucho puedo decir cosas como "... los vuestros hacen ésto ..." o " ... vosotros queréis lo otro ... " pero no voy de radical. ¿Y por qué? Por que respeto las ideas de los demás. Aunque no las comparta. Pero las respeto. Incluso hay veces que me permiten saber cosas que desconocía o que sabía a medias. Pero respeto. Hay gente que ataca, insulta y minusvalora a cualquiera que no le ría las gracias o no escriba o diga lo mismo que dicen ellos. Aunque sea lo mismo pero dicho de otra manera.
Así que, respecto al respeto, todo es respetable. Aunque no te guste. Nadie puede obligarte a cambiar lo que pienses, creas, digas y/o escribas. Nadie salvo tú mismo. Como dije arriba, si alguien lo hace, es un dictador.

lunes, 8 de mayo de 2017

Libertad democrática. ¿Democracia?¿Libre?

Cada uno tiene su idea de la realidad. De lo que pasa o debería pasar, de lo que se hace o se debería hacer, de lo que se dice o se debería decir. O de lo que no. Pero siempre, dado que así se debería haber enseñado a y aprendido de, respetando a que piense que pasa o debería pasar otra cosa, que se hace o debería hacerse otra cosa, que se dice o se debería decir otra cosa. O no.
También diré que, desde que supe que era la libertad y la democracia, siempre creí en ellas. Respetando a los demás, claro. Sobre todo con la libertad. Se decía que la libertad de uno termina cuando se coarta la de otro. Una forma muy fina de definir una dictadura. Desde hace un tiempo me he dado cuenta de una cosa. La gente de izquierda presume de defender y proclamar el apoyo a la libertad de expresión y a la democracia y piensa que piensa que todos los que son son de izquierda son de extrema derecha, fascistas, monárquicos, ultra religiosos y amantes del autoritarismo. Meten en el mismo saco a todo el mundo. Pero también me he dado cuenta de otra cosa y es que no soportan que alguien les lleve la contraria. Como se apoye esa contraria con argumentos, se van por los cerros de Úbeda. Se ve que no están acostumbrados a otra libertad de expresión que la suya. Por eso no les gusta que la gente les conteste porque sólo pueden contestarse entre ellos. En mi pueblo eso es ir contra de la libertad de expresión lo que lleva a una dictadura. Claro que, para ellos, una dictadura de izquierda no es tal. Sacando un poco de historia de la que recuerdo de mis tiempos de estudiante, les recuerdo (o les he recordado o les recordaré) que Adolf Hitler llegó al poder ganando unas elecciones y era de izquierdas. También que, no sé si el más largo o más estable, el segundo Gobierno de la II República lo llevó la CEDA que eran las iniciales de Confederación Española de Derechas Autónomas. Y que, según tengo entendido, el término facha o fascista que suelen usar al referirse a mí, tiene origen italiano del siglo pasado. Pero vamos, tras ello y que Paco Vázquez (creo que se llama así), el socialista que ganaba el Ayuntamiento de La Coruña a Lendoiro, era tan católico que cuando tuvo un problema con Zapatero, le mandaron de embajador al Vaticano. Que algún que otro dirigente importante del PP es gay (parte de la cúpula fue a su boda) y que, aunque eso no lo sé seguro, miembros de la derecha, ya sea del partido, de antes o de más allá, pueden tener respeto al Rey como jefe del estado pero preferían un Presidente.
En un principio no iba a escribir mucho más pero ayer tuve una conversación (a veces irrisoria, a veces estrambótica) con alguien cuyo único argumento era "viva Carmena". Y todo surgió porque puse una foto de una paloma muerta que llevaba tres semanas tirada en el suelo. Iba dirigida a toda la gente que defiende la gestión, no del partido o lo que sea que lleva el Ayuntamiento, sino de la jefa. Y en vez de decir si estaba bien o mal, automáticamente saltaron a mi cuello hablando de las actuaciones malas o peores de los antiguos rectores. Es más, tienen la costumbre de llamar "electa" a Ana Botella. Igual lo de las comillas es porque sólo fue elegida por sustitución, cosa que sólo está mal en el PP. Siempre hacen referencia a que publican lo que quieren. Y eso es lo suyo. Pero una cosa es escribir y otra, muy distinta, compartir. Tengo la mala costumbre de leer los artículos y, si me apetece, contesto sobre ello. Lo malo es que hay gente que comparte porque alguien ha compartido. Yo, por ejemplo, comparto las fotos de las creaciones que hace mi hermana en su panadería así como todos los actos que organiza. Pero sino, lo único que comparto son los juegos de agilidad mental.
Nadie tiene derecho a impedir a nadie a que exprese si opinión. Pero lo mínimo que pido es que, si alguien me contesta, sea coherente con lo que se habla y no se vaya ni por las ramas ni por Jaén. Se que no pasará porque son así. Pero mientras yo les respeto, ellos no hacen lo mismo conmigo.
En este mundo, para alegría y regocijo de todos (al menos mío), debe haber de todo. Pero algunos se equivocan y buscan cualquier cosa para no reconocerlo.
Ay, señor.

jueves, 4 de mayo de 2017

Diálogo.

El que más o el que menos sabe en que consiste el diálogo. Que significa dialogar. Una conversación entre dos o más personas sobre, necesariamente, un tema común. Los diálogos entre amigos no tienen porque tener un tema sobre el que hablar. ¿Por qué? Por que muchas veces surgen de forma espontánea. Es un diálogo informal. Pero los formales suelen tener una​ tema sobre el que se basan. Un orden del día donde se detalla sobre lo que se ha de hablar. Eso puede evitar lo que siempre hemos llamado "diálogo de besugos". "¿Qué hora es? Manzanas traigo". Un diálogo de besugos es un diálogo, sí. Pero diálogo. Pero el hecho de tener un orden del día hace que todo el mundo hable de lo mismo. Siempre me ha gustado el diálogo porque demuestra que hay una idea de entendimiento para hacer algo entre todas las personas que se sientan a dialogar alrededor de una mesa para hablar de algo entre todos porque ese algo del que se habla para hacer es importante. Por eso me gusta la situación política actual de este país. Nadie tiene la mayoría absoluta por lo que se está obligado al diálogo. Llegado a este punto hay que decir que cuando la gente se sienta para hablar de ese algo, deben llevar ideas sobre ese algo ya que lo incluye el orden del día. Lo que también se debe saber es que nadie va a conseguir todo lo que quiere porque para llegar a un acuerdo, que es el fin del diálogo (fin que se refiere al objetivo que no quiere decir que se acabe ese diálogo), todo el mundo debe ceder. Ir con la idea de imponer las ideas propias y que los demás las acepten y dialogar a partir de ahí, ni es diálogo ni es nada. Ahí salen las famosas líneas rojas. Unos las pintan, otros quieren borrarlas, alguno hay que se las salta, pero las hay. Eso significa no querer dialogar porque se sabe que los otros no se sentarán partiendo de que alguien impone algo. De esa manera todos se echan la culpa. Todos dicen que los otros no tienen voluntad de diálogo. Pues eso. Eso no es diálogo. Porque para dialogar hay que querer. Para dialogar hay que tener claro que hay que escuchar a los demás. Para dialogar hay que tener claro que se debe negociar. Para negociar hay que saber. Igual que para dialogar.
Y si alguien no está de acuerdo, podemos dialogar sobre ello. Ya se sabe que me gusta.

jueves, 20 de abril de 2017

Paja y viga.

Generalmente, aunque a veces se me va la pinza como a todo humano (bueno, realmente la hago adrede para que se vea que soy eso, un humano), aquí escribo sobre gente que va por un lado pero se equivoca. Y hay veces que, al igual que yo, también lo hace adrede. En ese caso, si me merece la pena hacerlo, le dedico un artículo.
Como todo el mundo (que me lee) sabe, muchos de mis contactos en Facebook son de izquierda. Más o menos radical. Pero de izquierdas. Hay gente que lo niega escribiendo mientras levanta el puño y canta La Internacional. O la tararea. Realmente, con una canción internacional (el nombre le va como anillo al dedo) como ésta, se tiene que tener mucho cuidado con las traducciones para que la letra cuadre con lo que se dice y siga el ritmo de la original. Gente que hace eso con canciones de ese tipo se merecen un premio. En cuanto a lo del puño, siempre pensé que debía ser el izquierdo por coherencia pero a Koletas (con k por que va de antisistema) y algunos de sus lameculos les he visto levantar el derecho. Igual es que no saben o es que el izquierdo es con el que recogen sobres. ¿O creéis que ellos están limpios? Según su regla de tres, si no hay políticos limpios, quien está en política es político. Como Koletillas que, después de criticar a los políticos que prometían, hizo un promesa. Son famosos los contratos a dedo de los que quitan unos euros para no tener que sacarlos a concurso pero se los añaden en otros conceptos o el número de asesores que tienen. Al menos eso he leído. Porque si voy al Ayuntamiento de Madrid, igual tengo que llevar un par de manos de repuesto por si las titulares se desgastan de tanta colleja. Pero ellos tiran balones fuera para que se miren las pajas en vez de fijarse en las vigas.
¿Y qué viene ésto? Pues a que llevan tiempo hablando de la gestión de Madrid, tanto Comunidad como Ayuntamiento. Pero claro, mientras por un lado son críticas, por el otro hay alabanzas. Lo que más gracia me hace es que, mucha de esa gente no ha pisado Madrid en su vida ni sabe nada de los rectores de ambos ámbitos. Lo único que les importa que en un lado está el PP y en el otro, no. Me parece bien que hagan éso pero que tengan en cuenta que hay gente que sabe más que ellos. Entre otras cosas porque hay gente que vive en Madrid. Los que viven aquí dejaron de hablar hace dos años. A saber por qué.
El otro día se produjeron dos noticias que llamaron la atención. Una fue la dimisión de Esperanza Aguirre y la otra, la muerte de Palomo Linares. Escribí una nota en Facebook sorprendiéndome que ninguno de ellos dijeran nada. Era la "caída" de un clásico de la política del PP y la muerte de un asesino, que es como se refieren a los toreros. De ésto último leí que les daba lo mismo cuando se han alegrado de las cogidas, sobre todo las graves, de toreros. Eso hacía que se centraran en el otro tema donde reconocieron que era odio hacia la persona y el PP, del que decían que era corrupto desde su creación.
Como también sabrán mis lectores, suelo respetar las opiniones de todo, me gusten o no. Si, lo hago. Aunque haya veces que no lo parezca. Y pido que hagan lo mismo con las mías. Por eso me enerva cuando como respuesta a mis comentarios se excusan, hacen referencia de pasada a lo que escribo o, como suele pasar, se van por los cerros de Úbeda. Es posible que ese sitio el más visitado de España.
Paja y viga. Por supuesto que ellos ven su viga pero intentan que otros critiquen la paja. Da igual que no la hayan visto pero alguien, que creen que lo ve todo, se lo ha dicho. Y así no miran a la viga de su director de orquesta. Que parece que a ellos no les molestan. Puede que porque ya se hayan acostumbrado.
La paja existe, sí. Pero no todas las veces que dicen. Porque a veces su viga les impide verla. Lo malo es que su grupo de palmeros van a denunciar una paja que no saben si está mientras soportan el peso de una viga que no saben que llevan.
Así les va.

jueves, 6 de abril de 2017

Dejar la puerta abierta.

Valga como entrada que todo ésto sale de mi cabeza en función de lo que he leído y oído. El hombre es un ser solitario pero se ha dado cuenta que hay cosas que no puede hacer sin apoyo. "Solo no puedes; con amigos, si". Quien tenga ciertos años recordará esta frase al final de una escena donde un niño jugaba al fútbol haciendo todos los papeles salvo el de árbitro. Jugadores y portero de ambos equipos. Luego llegaban otros chicos y montaban un partido. Por eso, para llegar a cosas hay que buscar apoyos o esperar que éstos vengan a uno. Pero hay una cosa que debe quedar clara antes de nada. Hay que saber qué debe hacerse, cómo y cuándo. Sino, como pasaba en el Madrid de los galácticos. No eran un equipo si no once jugadores. Alguien tiene que juntarlos y reunirlos. Sino, no van a ninguna parte aunque al principio vayan juntos. Se equivocan si creen que terminarán llegando a los objetivos. Algo así es lo que veo en Podemos (evitaré llamarles Engañemos como en otras ocasiones). No es un partido sino un grupo de gente de muchas ideas que han querido hacer algo. Puede que la idea fuera buena. Se supone que la base era el decálogo del 15-M pero que, poco a poco, se fue desvirtuando hasta que, creo, no queda nada. Y eso es algo que, también poco a poco, ha hecho que haya gente que decidió participar en el proyecto, se sienta desilusionado e, incluso, se ha bajado del tren en marcha porque no le gustaba la vía que se estaba cogiendo. Basándose en el diálogo

miércoles, 1 de marzo de 2017

Mayorías minoritarias. Minorías mayoritarias.

Como muchas veces cuando escribo en cualquiera de mis blogs, suelo tirar de mis recuerdos de los tiempos de colegio e instituto. De hecho, el haber encontrado a muchos de mis antiguos compañeros me ha inspirado alguna de mis artículos. Pero a lo que me refiero es a lo aprendido. En matemáticas nos decían que un conjunto era un grupo de elementos que tenían algo en común ya que debía haber algo que los reuniera. Es decir, el conjunto (que puede formar parte, a su vez de otro conjunto por lo que sería un subconjunto) es una mayoría formado por una cantidad indeterminada de minorías. Cuando hablamos de personas, aunque suele haber algún tipo de razón para unirlos (por ejemplo, nacionalidades), puede haber minorías que quieran que se les reconozca como miembros de pleno derecho dentro de un conjunto. Ésto no tiene nada que ver con el tema catalán. Ha surgido a raíz de una noticia que pasó en Madrid. Supuestamente, los mensajes de un autobús que recorría las calles de la capital molestó al colectivo LGTB (espero que no sigan añadiendo letras) porque decían que iban en contra de los niños que quieren cambiar de sexo. La verdad es que las frases grandes no me parecieron ningún insulto o incitación al odio. Decían verdades. Como he comentado en Facebook, una cosa es que uno es como nace y otra, muy diferente, como quiera ser. Lo dicho, sin odio ni insulto.
A uno le enseñaron a respetar las ideas y la forma de ser de todo el mundo, me guste o no. Pero uno empieza a estar cansado de las continúas reivindicaciones del colectivo. Queremos que no nos discrimine nadie pero, a las primeras de cambio, buscamos el demostrar que somos diferentes. ¿Qué derechos tengo yo, hombre al que le gustan las mujeres, que nació y ha crecido como hombre, que no tenga un homosexual? Nunca me han preguntado mi opción sexual en ninguna parte. Lo único, creo que es así, es adoptar. Tiene más posibilidades un matrimonio donde uno (o los dos) de los cónyuges es borracho o drogadicto. Eso es algo que no entiendo ni entenderé. Entonces, ¿a qué viene el estar reivindicando cada dos por tres? ¿Porque alguien llama maricones a dos tíos que van de la mano? ¿Acaso son una mayoría? A mí me pueden procesar por llamar maricón a un gay pero a él no le harán nada por responderme hijo de puta. Claro que igual le doy un sopapo. También pierdo yo en comparación de si me lo da él. Entonces yo me siento discriminado pero no puedo manifestarme porque no me lo autorizarían. Eso también es discriminación. Pero ellos pueden, por ejemplo, denunciar a los que han montado el autobús y está bien pero si fuera al revés, no. A mí me importa un pimiento si quien va a mi lado en el metro, en el ascensor o, mismamente, si fuera compañero de trabajo. Ni le voy a mirar mal ni a despreciar ni a insultar por tener un gusto sexual diferente a la mía o que se haya cambiado de sexo. Sólo le pido que haga bien lo que tenga que hacer. Trabajo, familia, amigos .... Yo estoy orgulloso de ser español pero también de ser madrileño y presumo de ello cuando puedo. Pero por no ser madrileño no discrimino a un andaluz, extremeño o castellano. Eso en este caso del que hablo no pasa.
Eso es algo equivocado. Mucho.

miércoles, 22 de febrero de 2017

El caballero de la triste figura.

Sólo conozco tres formas de dar un primer paso. La primera, la más lógica, es darlo porque sí. La segunda, que te lo pidan. Y, la tercera, que te empujen. Todas tienen su riesgo. Uno es común, el precipicio. No siempre se mira el suelo que se pisa a menos que, antes se haya hecho y se elija otro camino. Pero eso sólo pasa en el primer supuesto. Lógicamente, el primer caso se da cuando uno está seguro de que debe hacerlo. Es responsable de las consecuencias que tiene, más que dar ese primer paso, sino los que se puedan dar después.
En cuanto al segundo paso, uno puede esperar a que alguien le anime por dos razones. Una puede ser por no tenerlas todas con sobre esas consecuencias del segundo paso pero también puede ser porque uno quiere parecer que son los demás los que le animan a uno a dar ese paso. Claro que si se hace rogar mucho, o se pone en marcha la tercera forma de dar ese primero o, si quiere darlo, lo de él. Y la peor de todas es la tercera. Uno no quiere dar ese paso por nada del mundo pero es obligado. O quiere darlo pero no por el camino que le indican.
Pues aunque lo disimule, ese caballero a quien se refiere el título es el señor Pedro Sánchez. El hecho de no poder disponer del 20Minutos me fastidió no poder leer la entrevista que le hicieron. Un periódico que está de su lado porque, entre su ideario está el unirse a Podemos que, como todo el mundo sabe, tiene a la publicación como portavoz. Creo que el señor Sánchez ha dado ese primer paso de las tres formas. Cuando se convirtió en secretario general, dió el paso porque quiso. Para las segundas elecciones esperó a qué la gente le animara. Y, ahora, le han empujado porque ya estaba bien de marear la perdiz. Se ha equivocado el caballero de la triste figura. Si estoy largando contra los que me han quitado, que menos que presentar batalla en vez de ver quien da el primer paso por iniciativa propia. Uno no puede esperar a ver cuanta gente va con Tal y cuanta con Pascual. Si eres buen gestor lo sabes. Sabes que toda la gente que has devuelto a la primera línea, valgan o no, a la que pusiste para intentar parecer solidario, aparte de llevarte un puñado de votos que esa gente podría traer en unas elecciones, son personas que apareceran a tu lado. Pero se equivoca porque, así, dando el paso de una manera que no sea la primera, no va a ser su candidato. Va a ser el de otros. Fallo. Lo normal es que no se confíe en él. Le pusieron. Como hizo él con la señora que está al frente del Ayuntamiento de la capital. Mandan los de atrás. "Tú sólo has de sonreir y decir ésto que te damos y que tienes que aprenderte" Y ese es su ideario. No hay más. Y se equivoca más si no comprueba quien le pasa las notas. Porque igual tienen otros intereses. Y es que esa gente no tienen más ideario que el suyo. Más intereses que los suyos. Ni son caballeros ni tienen triste figura. Lo malo de todo este cúmulo de equivocaciones es que hay gente, fuera de todo, que lo ve. Pero en vez de avisar, se unen a los de la espalda. Siempre fue más fácil apuñalar desde ahí porque el de delante no suele mirar de reojo.
Pero sólo son percepciones mías. Aunque va por mal camino si va por donde ha dicho que va a ir. Estado federal (reclamación histórica socialista) y respetando la plurinacionalidad de la sociedad española. O sea, decir dos veces lo mismo para no decir nada. En eso el caballero no ha cambiado. Nada. Malo. Equivocación. El tiempo dirá.

lunes, 6 de febrero de 2017

Los otros.

Por mucho que lo haga pensar el título, en un principio no iba a ser una entrada de cine. Pero he pensado que sí. Película de suspense. Quien supiera de lo que voy a escribir (generalmente sólo tengo la idea pero no sé cómo voy a plasmarla) me podría decir que no tengo derecho a quejarme y protestar. Hablar no hay problema porque hablar es gratis. Pero protestar es otra cosa. ¿Porqué?¿Por no estar empadronado? Cierto que durante 7 años (mes arriba, mes abajo) no tuve mi residencia ni estuve empadronado en la capital. Y ahora, empadronado desde hace año y medio en otra parte aunque los cinco últimos meses viviendo en Madrid. Pero como se dice que un madrileño lo es siempre haya nacido donde haya nacido, siempre me he sentido como tal. Ya no quien me conozca pero sí que me haya leído, tanto por aquí o por Facebook, o me haya oído, sabe que el equipo al que pusieron al frente del Ayuntamiento de la ciudad más importante del país -aquí permítanme un inciso porque, al menos para mí, una cosa es ser elegido y otra, muy diferente, ser puesto. Y ya no hablo de estar puesto como parece algún concejal- no es de mi agrado. Y no lo es porque, por mucho palmero que tenga, su gestión, por llamarla de alguna manera, no es que sea mala, no. Es que es nula. Dentro de cuatro meses se cumplirán dos años desde las elecciones que perdieron todos los partidos menos uno. Pero en este país es más importante que no gobierne Fulano. Da igual que eso vaya en perjuicio de los ciudadanos pero eso es otro tema. También he dicho y escrito más veces, que el gobierno que está al frente del ayuntamiento madrileño (nunca me oirán ni me leerán juntar en la misma frase Ayuntamiento de Madrid y gobernar a menos que sea negativa) no ha hecho más que generar polémica. Crío la fama y me echo a dormir. Y la fama de la abuela, su equipo o quien la manda, es hablar. Da igual de lo que sea. Pero hablar. Lo único bueno que ha trascendido de lo que ha hecho fue aplicar el protocolo anti contaminación, creado, por cierto, por el anterior equipo de gobierno, la primera vez. Todo lo demás han sido cagas, meteduras de pata y globos sonda.
Pero la gota que colma el caso es proponer votaciones para decidir que hacer. Eso demuestra que no tenían, tienen, ni tendrán programa. El único programa que su formación ha tenido (o tiene, que no lo se) es el de HispanTV. Nada más. Porque piensan que ésto es un juego. Vale que no vas a llevar toda tu lista llena de políticos profesionales. Pero no lleves gente que su único mérito es ser amigo de, ser un delincuente (si para ellos es un delincuente cualquiera que esté en un proceso judicial aunque no sea uno de los acusados, ellos también tienen que pasar por lo mismo) o chaqueteros que lo han hecho para ver si rascan. No saben. No valen. No quieren saber. No quieren valer. Si no hago nada, no me equivoco. O sí. Pero nunca lo van a reconocer. Organizo paripés para que, supuestamente, la gente crea que decide. Es decir. Ellos no hacen nada. Lo hacen los otros. Señor bendito.